miércoles, 23 de marzo de 2011

Mis disculpas, sobre Tsunamis y los hombres malcriados.

Me han de odiar, son diez días (¡10!) en que no he actualizado el blog; mis mas sinceras disculpas por eso.

Como no muchos sabrán y algunos si sabrán, soy trilingüe y uno de los idiomas que hablo –y escribo, cabe recalcar- es el japonés, ahora, atemos cabos, si hablo y escribo japonés significa que tengo, no solo amigos que lo hablan, sino amigos japoneses con los que converso.

He de decir que el día en que hubo el tsunami no me entere hasta las 7:30 de la mañana en que estaba haciendo unos exámenes de sangre respectivos por el control que debo llevar cada 4 meses a causa de mi enfermedad –y sí, estoy enferma para toda mi vida y moriré con esto (es enfermedad congénita, no piensen mal)-.

Me entere de lo que ocurría y todos recurrimos al facebook a preguntar sobre nuestros seres queridos en el país del sol naciente o Estado de Japón.

Cabe recalcar que a nadie le pasó nada más que batirse un poco, la razón fue simple, se encuentran al centro sur del país.

Por otra parte tengo mucho que contarles, aparte de que estoy buscando trabajo y espero encontrar uno aunque sea por mi cumpleaños, el día de ayer estuve manejando, si, como siempre, maneje por la calle Miraflores para coger la Avenida del Bombero.

El chistecito fue así: manejaba en la calle ya nombrada con anterioridad cuando una señora ya mayor, manejando su auto salió por una interjección y, sin frenar ni esperar ni mucho menos pitar siguió de largo justo cuando yo seguía por dicho carril, tuve que frenar un poco y disminuyendo la velocidad miré por el retrovisor y los espejos lateral al carril de mi izquierda, un carro blanco venia así que lo dejé pasar y después de este decidí cambiarme de carril. Por otra parte un taxi amarillo venia apurado pitando desde bien atrás rebasando a diestra y siniestra y acelero al ver que yo apenas iba a cruzar, pienso que el pensó que podía pasar por ahí antes de que yo cambiara de carril, siendo que yo cambié rápido y el tuvo que frenar detrás mío.

Dicho conductor ni que decir que me lanzo las más hermosas palabras que jamás escuche en mi vida, además de unas lindas señales de amor y paz con sus bellos dedos de la mano –ironía, pura ironía-.

Yo, me escandalicé. No era la primera vez que me pasaba, una vez por no pasarme una amarilla un anciano me pitó, cuando por fin cambió a verde me rebasó, se puso delante de mí y frenó haciendo frenar a mí, ¿para qué? Pues para sacarme ese lindo dedo medio. Que bello son nuestros ancianos ¿a que si? –y esto nuevamente es ironía-.

¿Y qué hice?

No les puedo decir que me quede tranquila, porque tengo un temperamento fuerte, además de cómo ya dije me escandalicé, así que como señorita que soy, me lo quede viendo como si nada y cuando el señor miró por el retrovisor riéndose de mi simplemente lo saludé con una linda señal como las que me dedicó.

Debería decir que estoy avergonzada, pero no, no lo estoy, decir que si sería muy hipócrita de mi parte.

Más tarde, pensando en lo que había sucedido y lo que había terminado haciendo recordé este video:



Los que los niños ven aprenden.

Me dije que no quisiera que mi hijo hiciera lo mismo ya que según mi punto de vista faltarle el respeto a una mujer como el señor hizo conmigo es como faltarle el respeto a tu madre, hermana o hija.

Así que me dije, ¿Por qué no mejor compartir el video? Tal vez podría concientizar a algunas personas sobre esto.

Yo lo llamo inseguridad infantil.

Por último, ¿en qué ciudad vivimos que ya ni respetamos la luz roja?

2 comentarios:

  1. Me fascino ese comercial, segun tengo entendido fue finalista como uno de los mejores comerciales.

    Y es cierto, muchas veces me he encontrado en la Perimetral, manejando, cuando de la nada me cierran por delante algun picado por el simple hecho de que voy a una velocidad constante y no como si estuviera en una carrera Nascar, muchas veces no me siento segura conduciendo y no es por ser femenista pero... malditos hombres!, son ellos lo que hacen tonterias por todos lados en la calle y si choca una mujer todos contra ella.

    Pobre de nosotras D:

    Sobre el Tsunami, si, estuve muy pendiente de eso todo este tiempo.

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  2. La Perimetral... *.*

    Me ha dado tantas anecdotas que son buenas para contar, como la vez de ese tipo que creia se encontraba en una carrera conmigo y yo solo iba para mi casa.

    Eres una de las pocas mujeres que no lloran con solo escuchar la palabra 'perimetra' -se deberia insertar un eco para hacerlo mas dramatico, je,je-.

    En si no creo que sea culpa de los hombres en si, sino de la sociedad misma porque los mismos policias de transito dejan pasar muchas cosas y nunca corrijen los errores.

    He pecado tambien, eso es cierto, me han disculpado de los errores que he cometido -aunque sea solo uno-.

    Pero, muchos hombres por conducir se creen duenios de la caell cuando no es asi.

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